La realidad social y económica de Argentina muestra una fuerte tendencia hacia el enriquecimiento de los sectores de población con mayores ingresos y un empobrecimiento de los vulnerables.
Según el informe sobre distribución de ingreso durante el primer trimestre de 2025 del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), difundido este jueves, el 10% de la población con mayores ingresos percibió 15 veces más que el 10% más pobre. Se trata de la diferencia más elevada desde la salida de la pandemia, en 2021.
Al mismo tiempo, el Indec informó que el coeficiente de Gini -que mide la desigualdad de ingresos- fue 0,435 para la medición del ingreso per cápita familiar de las personas, mientras que un año atrás era de 0,467. El gobierno de Javier Milei festejó ese descenso, pero omitió que la comparación es contra el peor momento de la situación económica y social tras la devaluación del peso del 55%, en diciembre de 2023.
Del mismo modo, el coeficiente de Gini del primer trimestre de 2025 fue superior al registrado en el último trimestre de 2024, cuando su nivel fue de 0,430. Por otro lado, el nivel del Gini registrado en el primer trimestre de este año es uno de los más elevados de la serie y es solo comparable con el que existía en la época de la pandemia.
Otro análisis incluido por el Indec en su informe y que también refleja la dinámica a la concentración de ingresos es el dato sobre la proporción de la población con ingresos por debajo del 50% de la mediana del ingreso per cápita familiar de las personas. Según el estudio, se encontraba en el 20,4%, un nivel que indica que se encuentra con tendencia alcista y cerca de sus máximos históricos.
Este dato es relevante. El informe señala que la mediana de ingresos individuales (es decir, los ingresos que recibe la mitad de la población) fue de $ 397.500. Y la advertencia que hace es que crece la cantidad de personas cuyos ingresos no alcanzan a la mitad de esa cifra, equivalente a $ 198.750.
Un cuarto dato que muestra la tendencia a la concentración entre los más ricos es que el 30% de la población percibió casi el 62% de los ingresos, un nivel que viene en crecimiento desde la pandemia y que se consolidó tras la devaluación del peso de diciembre de 2023.