Los controladores aéreos que determinan el flujo aéreo en los aeropuertos del país, así como los técnicos y administrativos de las oficinas que regulan los planes de vuelo, al igual que otros trabajadores dependientes del estado nacional como los de los medios públicos, tienen sus salarios congelados desde agosto de 2024.
Además, la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) que junto con la Admisnitración Nacional de Aviación Civil (ANAC), gestionan el sector, produjo diez despidos que, el sindicato ATEPSA considera anti sindicales y, por lo tanto, ilegales.

Por ese motivo la entidad sindical había dispuesto un plan de paros escalonados durante el mes de junio que no pudo llevar adelante como resultado de la conciliación obligatoria que dictaminó, en aquel entonces, la Secretaría de Trabajo. La decisión en la cual el Estado resulta ser juez y parte, se tomó incluso cuando la legislación sindical específica del sector obliga a las entidades sindicales a garantizar un 45% del servicio que, en los cronogramas dispuestos por las asambleas, estaban contemplados.
Una vez vencida la conciliación y su prórroga respectiva sin que se hubiera resuelto ni el conflicto salarial ni el provocado por los despidos antisindicales, las asambleas de trabajadores promovidas por ATEPSA y realizadas a nivel nacional en forma virtual resolvieron dar lugar al plan de acción dispuesto previamente y, de nuevo, respetando las restricciones impuestas por la esencialidad que, además, fueron informadas a la patronal.

Foto: Martín Zabala / Xinhua
Así, el jueves 11 de julio debía comenzar un plan de acción con paros por turnos que afectarían el tráfico aéreo durante diez días del mes por lapsos de entre ocho y diez horas diarias. La medida, claro, tendría fuerte impacto porque afecta el tráfico aéreo durante el período vacacional de invierno cuando se incrementa la demanda por turismo.
Abuso ilegal de la conciliación
A pesar de que la normativa vigente en materia sindical no permite el uso del recurso de la conciliación obligatoria por más de un período con relación a un mismo conflicto, a horas de comienzo de la medida la Secretaría de Trabajo dependiente del ministerio de Capital Humano anunció una nueva disposición de esa naturaleza que, en los hechos, vulnera el derecho a huelga de los trabajadores.

La decisión de la cartera laboral, tal como indica la legislación laboral y sindical, implica retrotraer la situación previa al conflicto. En este caso, y así lo indica explícitamente el comunicado, el organismo intima a la EANA a «retrotraer los despidos producidos, por el plazo que dure el presente procedimiento conciliatorio”. De esta forma la eventual reincorporación definitiva quedará sujeta a una negociación que es lo que viene boicoteando la empresa estatal.
Sin embargo, a la hora de la discusión salarial, llevar las cosas al punto de partida no hace más que agravar las cosas y es evidentemente pernicioso para los trabajadores.
El comienzo del plan de lucha de ATEPSA sería acompañado por el Frente de Gremios Aeronáuticos con una movilización a Ezeiza que, en principio, se iba a desarrollar por la Autopista Ricchieri.
Fuentes del sector explicaron que, mientras se evalúa la legalidad de la disposición ministerial y su eventual acatamiento, queda confirmada la movilización y, además, un paro de pilotos pautado para el 19 de julio.